Los epitafios representan un último homenaje que se les rinde a las personas fallecidas. Sin embargo, en la literatura, estos cortos mensajes han servido para expresar sentimientos profundos, reflexiones sobre la vida y la muerte, e incluso, han sido utilizados como instrumentos de crítica social y política. A continuación, presentamos 10 ejemplos de epitafios en la literatura:
Epitafio 1: «I told you I was ill»
Este epitafio corresponde al famoso comediante británico Spike Milligan y puede considerarse como una de sus últimas bromas. Se traduce como «Te dije que estaba enfermo», dejando claro que su humor particular lo acompañó hasta el final.
Epitafio 2: «Aquí yace uno cuyo nombre fue escrito en agua»
Este fue el epitafio que escribió el poeta John Keats. Con esta frase quería reflejar la efímera e insustancial naturaleza de la vida y la fama.
Epitafio 3: «No tengo amor, ni un hogar, ni un lugar de descanso en toda la tierra: abierta al sol, mi sombra ardiente parece hogar para mí»
Estas palabras son parte del epitafio de Emily Brontë, autora de «Cumbres Borrascosas». En él resume la sensación de no pertenecer a ningún lugar, algo recurrente en su obra.
Epitafio 4: «Para los amantes, el corazón solo puede tener un destino. Aquí yace Heloise, la desafortunada»
Este epitafio está en la tumba de Eloísa, personaje principal de una trágica historia de amor de la Edad Media. Este texto expresa la desdicha de un amor imposible.
Epitafio 5: «Lector, yo también fui mortal, y ahora yaces donde estaré.»
Epitafio de Gabriel García Márquez. En él, el autor comparte una reflexión sobre la inminencia de la muerte que todos enfrentaremos.
Epitafio 6: «Aquí yace Dobby, un elfo libre»
Este conmovedor epitafio aparece en Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, y hace referencia a la libertad que tanto ansío y finalmente consiguió Dobby, el elfo doméstico.
Epitafio 7: «Él vio todo, sobrevivió todo y olvidó nada»
Epitafio de Elías Canetti, ganador del premio Nobel de literatura. Este epitafio es un resumen simple pero poderoso de la vida del autor.
Epitafio 8: » Muerto para la nada, vivo para sí mismo «
Esta cita pertenece a William Blake y fue puesta en su lápida a modo de epitafio. Expresa su creencia en la inmortalidad del alma.
Epitafio 9: «Amó a los animales. Amó a los pájaros. Amó a todos los seres vivientes»
Este es el epitafio de Beatrix Potter, conocida por sus cuentos infantiles. En su tumba dejó plasmado su amor por la naturaleza.
Epitafio 10: «Aquí Jorge Luis Borges. Fui lo que fui. Una mezcla de fealdad, de esplendor y soledad.»
El escritor argentino eligió hermosas palabras para su epitafio, siendo una última forma de su arte y un resumen de su vida y obra.
