Los tankas son formas poéticas japonesas que constan de cinco líneas. Aunque existen desde hace más de mil años, están ganando popularidad en la literatura moderna. Al igual que los haikus, los tankas presentan una perspectiva única y poética sobre el mundo a través de un número limitado de palabras. Aquí te presentaré 10 ejemplos de tankas para ayudarte a entender mejor esta forma de poesía:
Ejemplo 1
Bajo la luna,
las flores de cerezo,
como un sueño vago.
La primavera se va,
y yo aún pienso en ti.
Ejemplo 2
Las hojas caídas
flotan en el río lento.
El otoño pasa,
y el frío invierno espera:
otro año ha llegado.
Ejemplo 3
Al amanecer,
escucho el canto del ave.
El sol se eleva,
y una nueva vida inicia:
un regalo del cielo.
Ejemplo 4
Sobre las montañas
la luz de la luna danza.
En la quietud,
la belleza se revela:
simple, pero profunda.
Ejemplo 5
Camino solo
bajo la lluvia espesa.
Cada gota cae,
como lagrimas divinas:
la tierra se renueva.
Ejemplo 6
Las olas rompen,
y el mar devuelve susurros.
En la arena,
los secretos son guardados:
historias del abismo.
Ejemplo 7
En la oscuridad,
los luceros dan consuelo.
A pesar del miedo,
hay una luz que persiste:
la esperanza nunca muere.
Ejemplo 8
Late un corazón,
música que da vida.
Con cada pulsar,
resuena el eco eterno:
el ritmo de existir.
Ejemplo 9
Vuela la mariposa,
frágil y efímera.
Con su alegría,
nos muestra la verdad simple:
la belleza está en vivir.
Ejemplo 10
La brisa suspira,
acaricia los árboles.
Hojas bailan,
y se unen a la danza:
un vals de la naturaleza.
Esperamos que estos ejemplos te inspiren en tu propio viaje poético y te ayuden a apreciar la belleza de las cosas simples y cotidianas. Recuerda, la clave de un buen tanka es capturar un momento, una emoción, una visión. ¡Buena suerte!
